jueves, 25 de febrero de 2010

Sociedad y Sistema Educativo-Interculturalidad

Este es el parcial final hecho por Diego Caminos, Sofía Novillo y Rubén Santillán.

Introducción
La interculturalidad es reflexionar, es fortalecer, es respetar, es compartir, desde una posición crítica, las diferentes culturas y reconocer entre ellas índices de igualdad en vez de supremacía de una sobre otras.
Actualmente, la interculturalidad es un proceso constructivo en donde las partes involucradas, desde el esfuerzo generado a partir de una interdependencia, busquen encaminarse hacia un objetivo común. Esto implica eliminar los prejuicios, escuchar y ser capaces de aprender y enseñar simultáneamente, para lo cual es condición sine qua non promover –no sin consenso- propuestas aptas para prácticas pedagógicas inclusivas.
Gabriela Novaro sostiene: “La interculturalidad se manifiesta en distintos aspectos de la escolaridad: las relaciones entre la escuela y las familias, los objetivos y propósitos buscados, las concepciones sobre los alumnos y sus intereses y condiciones de aprendizaje. La interculturalidad también se manifiesta, por supuesto, en las áreas curriculares”. En tal sentido, R. Diaz concluye que “se trata de comenzar a reconceptualizar y reestructurar las propuestas curriculares y jerarquizar ciertos temas; se trata en definitiva de cambiar el enfoque”.
Dichas propuestas de educación intercultural parten de postular que el trabajo con la diversidad cultural en la escuela puede, según Novaro, desarrollar la capacidad de “interpretar códigos diversos, enseñar a convivir con la ambigüedad y relativizar los logros de la propia cultura, debe permitir cuestionar y enriquecer tanto lo que se enseña, como la forma en que se lo hace y fundamentalmente la reflexión sobre el para qué hacerlo”.

Estas nuevas formas curriculares promueven una relación mucho más dinámica entre educandos y educadores, aceptando y reconociendo así distintas formas de aprender. Una de ellas es la que describiremos y analizaremos en el presente trabajo.

Consideraciones previas
La experiencia a analizar corresponde al Centro Educativo "Norgvbamtuleayiñ – Newen”, de la provincia de Neuquén, y es coordinado por organizaciones mapuches. Dicha experiencia lleva por título “Fortalecimiento del Sistema Educativo Mapuche”.
En lo que a cultura e identidad respecta, el mapuche no separa el universo de la naturaleza, se siente parte de ella, por lo que para él no existe lo superior o lo inferior sino lo diverso. Acepta y convive con la diversidad respetando todo lo que existe, considera al mundo como algo sagrado y que debe compartir con otros seres que actúan en distintas dimensiones, en tiempos y en espacios infinitos. Por eso los ritos y ceremonias mapuches tienen un significado místico, trascienden y ocurren en el pasado, presente y futuro. Es más, entre los mapuches hay una estrecha relación entre su identidad cultural como pueblo y su identidad religiosa, ya que esta se liga a la tierra y a la naturaleza, se une hasta confundirse con lo sagrado, representado por las divinidades y antepasados. Es decir que su cultura, sus valores, su arte, su música, su cosmovisión, su uso de materiales de la naturaleza (como los telares y la alfarería); todo en su vida es “religioso”.
La “nación mapuche” defendió con la lucha ante el invasor, y defiende hoy ante la incomprensión de los estados modernos, el valor y la riqueza de su cultura y religiosidad sin la intención de imponerlas a nadie. Defender, profundizar y fomentar su mundo es hoy tarea no sólo de los mapuches sino de todos los que compartimos un mundo evidentemente diverso. La unidad del mundo nunca será posible sino se empieza por el respeto a las diferencias.
Ahora sí, hecha la introducción aclaratoria sobre aspectos básicos de la comunidad mapuche, nos metemos de lleno en la experiencia elegida para el presente trabajo.

Fortalecimiento del Sistema Educativo Mapuche
Experiencias de educación intercultural | Sur
Provincia Neuquén
Departamento Confluencia
Localidad Ciudad Capital
Institución Centro Educativo "Norgvbamtuleayiñ" - Newen
Mapu Coordinación de Organizaciones Mapuche
Autor/es María Piciñan, Noemí Sanchez, Rosa Nahuel,
Kajfvrayen Kalfinahuel, Mijaray Paillalef, Relmu Ñanku
Etnias/Grupo de origen Mapuches.
Cantidad de alumnos total 38
Cantidad de alumnos aborígenes 38
Cantidad de docentes total 6
Cantidad de docentes aborígenes 6
Tipo de gestión p/e Asociación Civil sin fines de lucro
Localización urbano/local urbano
Lengua/variedad dialectal mapuzungun, castellano

Narración de la experiencia
La Educación Mapuche se basa en el NOR MOGEN, que es el ordenamiento del IXOFIJ MOGEN, la diversidad biológica. El mapuche ve la vida como una totalidad, donde todo está interrelacionado. Porque cada una de las fuerzas de la naturaleza cumple un rol, donde el Ce (el ser humano) es el responsable de mantener el equilibrio y la armonía del WAJ MAPU (territorio).
Es por eso que desde la concepción de la persona, la familia y la comunidad comienzan el proceso de educación que continuará aun después de la muerte.
Hoy hablamos de recuperar nuestro ordenamiento de vida, NORGVBAMTULEAYIÑ. Para darle a nuestra educación una continuidad que ha permanecido en la sabiduría del Pueblo Mapuche. En base a la organización

comunitaria donde existen relaciones sociales y relaciones naturales que se mantienen en equilibrio y donde la familia es el núcleo básico.
Los módulos que componen el contenido educativo de nuestro Centro reflejan este proceso que, sistematizado, será el recurso pedagógico que aportaremos a la educación intercultural que pretendemos se aplique desde la educación formal.
Ahora bien, para que la educación intercultural se efectivice, debemos tener en cuenta que aún tratando este proceso desde el punto de vista de la educación formal-tradicional propuesta por los responsables de esta experiencia, ello no significa subordinar un sistema –dado por su lengua materna, su cultura, su cosmovisión- al otro. De allí que, tal como afirma Beatriz Gualdieri, “en el trabajo con poblaciones indígenas, el enfoque intercultural implica privilegiar “su” palabra y dar espacio para el conocimiento, valoración y producción de su cultura. La propuesta de una educación intercultural es producto del reconocimiento que se debe hacer de la interacción y el diálogo, que caracteriza las relaciones entre grupos culturalmente diversos. La interculturalidad implica pensar las relaciones entre las culturas y reconocer que entre ellas existen relaciones ambivalentes y conflictivas”.
Hoy una gran parte de nuestro Pueblo está radicado en las ciudades. Los elementos sustanciales que nos identifican como Pueblo se encuentran en la vida comunitaria y en la vida familiar. Pero, al estar insertos en un sistema de vida urbana, esos lazos esenciales corren riesgo de perderse; por eso es urgente retomar nuestra propia forma de educación, en medio de esta ciudad, para no perder nuestra identidad.
Pero esto no puede quedar en un proceso interno, ya que nuestros hijos concurren a la escuela estatal como corresponde a todo ciudadano de este país. Es en esa escuela que pretendemos que nuestros contenidos pedagógicos y metodológicos sean reconocidos como aporte útil para el desarrollo de ambas culturas; en una nueva sociedad que se asume pluricultural y pluriétnica.
Esto significa que la integración debe ser bilateral, por lo que no cabe preguntarse quién se integra sino cómo nos debemos integrar. “Lejos de la adecuación o asimilación de los grupos aborígenes a un modelo escolar predefinido, se trata de reformular la propuesta con su participación activa”, asevera Gabriela Novaro. Para ello, es de suma importancia tener claros los objetivos a seguir.

Objetivos
 Desarrollar una educación donde se forme y fortalezca la identidad del niño. La lengua presenta una posición semántica y simbólica y pasa a ser el mapuzungun uno de los índices de identidad mapuche, buscando así alcanzar que la lengua vernácula motive que los jóvenes se asuman como mapuche, reconociendo y fortaleciendo su identidad. Asimismo, se destaca que entre los mapuches existe una estrecha relación entre su identidad cultural como pueblo y su identidad religiosa; tal como reza María Delia Solá en su libro Aborígenes Argentinos, “esta se liga a la tierra y a la naturaleza, se une hasta confundirse con lo sagrado, representado por las divinidades y antepasados. Es decir que su cultura, sus valores, su arte, su música, su cosmovisión, en una palabra su vida es “religiosa” (pág. 157).

 Recuperar la memoria histórica cultural del pueblo mapuche. Es decir, a través de distintas acciones de participación comunitaria -además de la lengua-, se comparten y transmiten historias, comentarios, costumbres compartidas y recuerdos comunes para lograr refrescar y traer a la memoria aquellos elementos que nos remiten al pasado y que a la vez nos vinculan al futuro. En términos de María Eugenia Choque Quispe, “la historia es reconstitución, por y para los vivos. En los Andes, esta afirmación se expresa como una constante interrogación al pasado para afianzar la existencia colectiva”.

 Formar un sujeto intercultural dispuesto a producir transformaciones que le permitan un desarrollo social, cultural, político y económico en el medio donde vive. Este objetivo persigue solucionar la pobreza y

marginalidad indígena, que al decir de Quispe “pasa por una solución política que consiste en ejercer el derecho a la autodeterminación. Pero antes, se debe resguardar el cumplimiento de los derechos económicos y sociales, por su carácter de “derechos de segunda generación”. según consta en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, proclamada el 10 de diciembre de 1948. De más está remarcar que para que un sujeto ejerza su autodeterminación debe estar formado para alcanzar dicho objetivo y el medio ideal para lograrlo es desde una escuela intercultural. afirma Caminiezky, Los mapuches neuquinos dicen que “La educación autónoma mapuche no se aprende en la escuela, sin embargo la escuela es importante para el mapuche tanto en un sentido instrumental, como para construir un dialogo con otros”.

 Proporcionar una formación basada en los principios de la educación intercultural que prepare al alumno a partir del fortalecimiento de su propia identidad cultural, y que este sea capaz de crear un espacio de relación con la sociedad. Además de la formación anteriormente citada, se busca generar en el sujeto la necesidad de interactuar y participar en cuanta actividad comunitaria conlleve a concretar dicha formación.

Para poder ejercer la educación intercultural necesitamos fortalecer nuestra propia educación, para luego entablar una nueva relación con la otra sociedad. Nuestra apreciación al respecto, versa en torno a considerar al mapuche no como otra sociedad –tal como afirman los autores de la experiencia-, sino como otra cultura.
Eso se hizo posible por medio del trabajo con el gremio ATEN (Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén), que se ha comprometido a acompañar la propuesta entendiendo la interculturalidad como un derecho de todos, creando conjuntamente espacios de discusión y difusión del proyecto.
Encuentros con maestros rurales que trabajan en escuelas de comunidades mapuche y criollas:
• 1º Naunauco (1994) - 2º Chos Malal (1997) - 3º Aguada Florencio (2000)
Cursos de capacitación con maestros urbanos de diferentes localidades:
• 1º Neuquén Capital (1997) - 2º Cutral Co (1998) - 3º Zapala (1999) - 4º Centenario (2000) - 5º San Martín de los Andes (2000) - 6º Junín de los Andes (2001) - 7º Villa La Angostura (2001).
Charlas-debate en escuelas primarias, secundarias, en terciarios y universidades: Ponencias sobre interculturalidad en:
• "Foro sobre políticas educativas", U.N. Comahue, Neuquén. (2000).
• "Políticas rectoras para una educación ambiental", Administración de Parques Nacionales, Buenos Aires (2001)
Capacitación de responsables del proyecto
Encuentros con otros pueblos originarios e intercambio de experiencias:
• Panamá (1999), 2do. encuentro regional de mujeres indígenas.
• Canadá (2000), 3er. encuentro enlace continental de mujeres indígenas.
• Ecuador (2001), Intercambio de experiencias comunitarias para el desarrollo en áreas indígenas.
• Chile (2001), Universidad de la Frontera - Instituto de Estudios indígenas.
• Universidad Católica de Chile.
• Cinkowe - Jardín mapuche de Chile.
Participación en el Proyecto "Construcción de espacios Interculturales en la Provincia. de Neuquén", elaborada por el CEPINT (Centro de Educación Popular e Intercultural), Facultad de Ciencias de la Educación de Río Negro.

Se elaboró un documento sobre educación intercultural en la provincia de Neuquén. El Centro Educativo Norgvbamtuleayiñ aportó el conocimiento mapuche y la experiencia desarrollada por el mismo.
Desde el año 1992 a la fecha la organización mapuche decidió abrir un espacio para los no mapuche en la ceremonia del WIÑOY XIPANTV -la vuelta del año- fortaleciendo la nueva relación con la otra sociedad y el acercamiento de la misma al conocimiento mapuche.
Primera experiencia intercultural en la Escuela Nº 161, paraje Puente Blanco, comunidad mapuche Kuruwigka, ubicada a 10 km de San Martín de los Andes; conformándose una comisión integrada por representantes de la C.O.M. a través del Centro Norgvbamtuleayiñ, padres de la comunidad, profesores de la Universidad Nacional del Comahue, maestros, directivos y supervisores del establecimiento, para elaborar la planificación institucional, el proyecto curricular y los ejes de trabajo de la escuela en el marco de la interculturalidad. Experiencia iniciada el 4 de agosto del corriente año.
"NORGVBAMTULEAYIÑ" en nuestro idioma significa "Retomamos nuestra propia forma de ordenarnos". En este Centro de Educación asisten treinta y ocho niños mapuche, en su mayoría hijos de los miembros de nuestra organización, quienes trabajan en talleres coordinados por distintos werken de nuestra organización.
El grupo de niños viaja mensualmente a distintas comunidades mapuche donde se realizan encuentros comunitarios, comparten ceremonias, actividades, juegos, danzas y conocimientos indispensables para el desarrollo de la educación mapuche.
A su vez los cinco coordinadores de los talleres se reúnen con las autoridades del Pueblo Mapuche: logko, pijan kuse, werken, donde se autocapacitan sobre el conocimiento mapuche, se ordenan entre todos, se evalúan los distintos trabajos y se proyectan futuras actividades. Simultáneo a esto se realiza la capacitación de los jóvenes y adolescentes de las comunidades a fin de poder asumir responsabilidades crecientes en su lof (comunidad), para buscar alternativas económicas que les permitan vivir dignamente dentro de su propia comunidad, ya que la educación estatal no ha dado a nuestros hijos las herramientas necesarias para desenvolverse en mejores condiciones con la otra sociedad. Este es el nuevo desafío que como Centro de Educación Mapuche debemos enfrentar.
Actividades del centro de educación "Norgvbamtuleayiñ"
• Cursos de capacitación con maestros urbanos de diferentes localidades.
• Cursos de capacitación con el gremio ATEN.
• Talleres de capacitación en diferentes comunidades.
• Charlas en diferentes niveles educativos.
• Seminarios y encuentros referentes a la Educación Intercultural.
Las actividades educativas que desarrollamos con nuestros niños:

Taller de mapuzungun
El idioma originario mapuche es la fuente de nuestro conocimiento e identidad. Allí se deposita nuestra historia, la explicación de nuestro origen y nuestro sistema de pensamiento. Dice Gualdieri con respecto a este tema de la lengua e identidad: “Nos constituimos como integrantes de una comunidad en gran medida mediante el lenguaje”, pero la lengua no constituye un todo en sí misma, sino antes bien es parte inherente de otros factores más amplios como una historia común, pautas y”prácticas culturales que les permita identificarse como distintos de los otros”.
Si bien la práctica del mapuzungun se ejercita en todas las áreas, es imprescindible a través del mismo transmitir al niño el Rakizuam y Kimvn mapuche (pensamiento y sabiduría).
Si bien nuestro idioma siempre se transmitió en forma oral, actualmente contamos con el Grafemario elaborado por nuestro hermano Anselmo Ragileo, en el cual nos basamos para la recuperación de nuestro idioma. El motivo de esta elección es que con dicho grafemario no se distorsiona la fonética mapuche, es de fácil comprensión y manejo para las personas que no tienen conocimiento de lingüística, y los más de diez años que llevamos utilizándolo nos demuestran lo apropiado de este grafemario (nuestros niños en el inicio de la lectoescritura lo han adoptado con éxito).
Objetivos
• Pronunciar correctamente el idioma mapuche.
• Utilizar el alfabeto Ragileo, pudiendo leer y escribir correctamente el mapuzugun.
• Entender el sentido de lo que escucha (aunque no pueda entenderlo en forma literal)
• Realizar diálogos sencillos en mapuzugun.
• Comunicarse con sus pares y con el medio que lo rodea utilizando el idioma mapuzugun.
Taller de Telar
A través de ésta área fortalecemos esta expresión artística milenaria, donde nuestras mujeres crearon diseños que fueron el comienzo de nuestra escritura. Forjamos allí también la alternativa laboral que dignificará el trabajo de las artistas mapuche, al que nuestros niños darán continuidad.
• Construir los propios elementos para la elaboración del telar: uso, tortera, telar, etc.
• Conocer y utilizar las diferentes técnicas de teñido con elementos naturales.
• Armar un telar, realizando el urdido y el tramado del mismo utilizando las diferentes técnicas: peinecillo, laboreo y tejido mecha.
Taller de Alfarería
Otra de las formas en que el mapuche expresa sus sentimientos de trascender. Nuestros niños aprenden el arte que, sin premura, los alfareros, con asombro por el mundo que los rodeaba, volcaron en objetos múltiples, y que eran respuesta a necesidades comunitarias.
Por ello, las obras que nacen de las manos de nuestros hijos no son meramente decorativas, sino que son elementos que se requieren en la vida diaria (platos, vasos, vasijas, etc.) con los que se realiza la ceremonia del Xafkintu -intercambio- para simbolizar la unión solidaria, para compartirlos en nuestras fiestas y ceremonias, convivencia, gejupun, etc.
Aprendemos comunitariamente a construir un horno de barro, a conocer los distintos tipos de arcilla, a preparar el material, a realizar piezas de distintos tipos, a decorarlas, a impermeabilizarlas y hornearlas, mediante las técnicas milenarias desarrolladas por el Pueblo Mapuche.
Objetivos
• Reconocer de la materia prima y los lugares donde se encuentra (arcilla, caolín, arena).
• Realizar pruebas de las diferentes arcillas, evaluar la calidad de la misma y elaborar la pasta para la elaboración de piezas.
• Conocer los pasos de la construcción del horno y participe en ello.
• Confeccionar las herramientas necesarias para la elaboración de las piezas.
• Conocer y utilizar las distintas técnicas milenarias de decoración.
• Modelar diversas piezas respetando el diseño mapuche.
Taller de Música y danza
En esta área recuperamos y promovemos el canto y el baile, a través del cual nuestro Pueblo expresa su relación armónica con el medio ambiente (ixofij mogen). Experimentamos nuevas formas, ritmos y sonidos de un arte que aunque milenario ha quedado detenido en su desarrollo. También aprendemos a elaborar nuestros propios instrumentos.
Objetivos
• Elaborar instrumentos musicales con materiales naturales y artificiales.
• Elaborar elementos para las danzas (anvm, xariwe, xarilogka, etc.).
• Aprender a utilizar cada instrumento.
• Aprender a entonar vl kantum, tayil, combinando con los instrumentos.
Taller de EPEW - teatralización
A través de desarrollar el EPEW (relatos teatralizados) ponemos en práctica un sistema de enseñanza practicado al interior de nuestra cultura donde los mayores enseñaban valores y principios comunitarios, solidarios y de respeto al medio ambiente, transmitidos en fábulas, leyendas, mitos, que nuestro Wewpife (historiador) conservó y proyectó.
Objetivos
• Desarrollar habilidades estético expresivas que enriquezcan la personalidad de los picikece-niños.
• Enriquecer los factores intelectuales y socio-afectivos que se complementan con el aprendizaje de epew-cuentos -, vlkantum - canciones -. Poder sentir y expresar los propios pensamientos y de esta manera poder transmitirlos a los niños no mapuches, ejercitando así la nueva relación.



Visita a las Comunidades
Es esencial la comunicación permanente con nuestras comunidades, donde los niños tienen la posibilidad de recibir de manera real y efectiva la educación mapuche a través de su proceso natural: INAZUAM, RAKIZUAM, GVBAM, KIMVN (observación de la naturaleza, pensamiento, análisis, conocimiento); y a través del GVXAM (oratoria) de las Autoridades Originarias: LOGKO, INAN LOGKO, PIJAN KUSE, WEWPIFE, WERKEN, KONA; conocer la memoria histórica del Pueblo Mapuche.
Objetivos
• Fortalecer y hacer práctica todo el conocimiento adquirido en el Centro Educativo.
• Ampliar el conocimiento de los talleres.
Como podemos observar, existen varias formas de mantener viva una cultura. En general, los niños son los que realizan las actividades a través de las cuales la historia, escritura y las costumbres siguen vigentes; sólo que a partir del proceso llevado a cabo mediante las actividades propuestas, su cultura se formaliza, puesto que pasa a formar parte del sistema educativo.

Documentación
En este proceso educativo tan dinámico que llevamos adelante es sumamente necesario documentar en audio, foto y video los procesos y los logros obtenidos para editar posteriormente videos:
1. Filosofía (ceremonias religiosas).
2. La educación Mapuche en el ámbito comunitario y en el ámbito urbano.
3. Historia de la cultura mapuche y realidad actual.
4. Uso del idioma en la transmisión del conocimiento y la cultura.
Estos materiales luego de elaborados se utilizarán en las charlas debate sobre Educación Mapuche e Intercultural en el ámbito educativo, y en los cursos de capacitación que se realizan periódicamente con los docentes y que en este caso surgirá de una programación organizada.
Para que esto suceda, en la práctica existen actualmente dos inconvenientes básicos:
• La indecisión política de implementar como Estado una educación intercultural.
• La falta de recursos pedagógicos, metodológicos y didácticos para esa educación intercultural.

Es decir que los inconvenientes que se manifiestan son básicamente a causa de la falta de interés, compromiso y responsabilidad de parte del Estado. Además este, como ente intermediario, debe “regular” las actividades, principalmente las concernientes a la capacitación permanente de los docentes.
Asimismo, las escuelas deben mantener sus espacios de autonomía, pero teniendo en cuenta que es importante valorar los marcos legales que son útiles en determinadas experiencias.
Es decir, que tanto el Estado como la escuela deben comprometerse, equilibrando de esta manera el trabajo correspondiente a una adecuada y necesaria educación intercultural.




Fundamento del Equipo de Investigación
Actualmente el sistema educativo carece de los recursos pedagógicos y metodológicos que darán contenido real a una Educación Intercultural donde ambas culturas se enriquezcan de la diversidad cultural que compone la sociedad neuquina.
Los conocimientos mapuche que se recrean a través de la actividad didáctica de los docentes mapuche en los cinco Talleres serán recogidos a través del seguimiento permanente que realizarán estos investigadores mapuche, que a través de su plan de trabajo investigarán, reconstruirán y sistematizarán la cultura (historia, cosmovisión, prácticas y conocimientos).
La construcción de una educación intercultural no es simple. En su sistematización se deberá superar la incoherencia metodológica producto de dos sistemas culturales distintos.
La tarea del equipo investigativo es aportar no sólo materiales didácticos y bibliográficos sino también técnicas para la planificación y la implementación de la Educación Intercultural, apuntando a la transformación de la currícula escolar, currículum de las carreras de pedagogía y en los Programas de Formación de Docentes.

Equipo de investigación
El investigador mapuche es un agente intercultural, que debe conocer el manejo del conocimiento mapuche y no mapuche, estrategias y elementos de ambas culturas.
Módulo de investigación
Objetivo: proveer la información y el conocimiento que será sustento de los distintos talleres.
Metodología y alcances: La recuperación y vigencia de nuestra cultura permitirá fortalecer la educación autónoma a través de un trabajo de indagación y sistematización de la memoria comunitaria tanto oral como documentada de nuestro propio pueblo. Y no sólo reducida a los ámbitos de las Comunidades actualmente establecidas, sino también a la circulación más amplia y comprometida con otras circunstancias de ocupación y uso del territorio.
El conocimiento de la nacionalización y estatización de nuestro Pueblo remite no sólo a investigar a través de la recuperación de la historia negada sino también de las resistencias y luchas de nuestro Pueblo. Cada aspecto de la cultura es resultado de relaciones de poder y su reconocimiento implica mirar el pasado no como estático sino en sus dinamismos relacionados con la opresión y la explotación de nuestro pueblo.
Si bien ha habido una permanente recopilación de la cultura mapuche, casi nunca nuestra propia gente ha participado de ese trabajo, por lo que tampoco ha repercutido ese conocimiento en el fortalecimiento de nuestra educación. Nos proponemos autorrecuperar y hacer vigente la cultura originaria pero bajo nuestros propios procesos educativos y formativos, por lo que la investigación articulará los aspectos de recolección cultural con la averiguación de los modos de transmisión/invención y educación diferente y característica de los mapuche.
Como estrategia de investigación parecen las de mayor rendimiento en esta etapa las que provienen de la llamada "historia oral", basadas en la reconstrucción testimonial de la memoria teniendo en cuenta que la narración del pasado implica también una interpretación que se hace desde el presente, aspecto determinante en tanto esta vez se procurará "nuestra" propia interpretación.
De acuerdo con las metodologías y alcances, el pueblo mapuche (al igual que la mayoría de los pueblos originarios) hace incapié en la recuperación, autorecuperación y recopilación de la cultura, pero ahora entendiendo la misma como producción social de sentidos, como una forma de significar y organizar las experiencias del mundo; todo ello sin dejar de considerar que, en dicho proceso, tanto el contexto como las contradicciones y los cambios deben tener cabida.

Actores involucrados
Tipo y cantidad de miembros de la comunidad educativa participantes en la experiencia (supervisión y dirección, docentes, alumnos) y niveles de intervención de los diferentes actores:
• Dirección: una coordinadora del centro educativo.
• Docentes: cinco WERKEN -responsables- del centro educativo.
• Alumnos: treinta y ocho alumnos mapuche.
Las personas involucradas en la experiencia, somos todos mapuche, ya que el origen de este centro educativo fue y es recuperar, fortalecer la identidad mapuche, en un contexto de urbanidad.
Reconstruir la identidad mapuche desde la base de la cosmovisión milenaria sin desligar la reivindicación de los derechos fundamentales, como parte esencial de la educación que deben recibir los picikece.
Este es un proceso que como pueblo mapuche nos estamos dando: fortalecer la educación autónoma, para también al mismo tiempo construir una nueva política educativa que abarque al pueblo mapuche y a la sociedad no mapuche, en un proyecto de nueva relación a través de la interculturalidad.


Perfil del alumno
El alumno es un sujeto cultural, es decir, pertenece a un pueblo y a una cultura determinada.
Pretendemos formar un alumno que sea capaz de formular objetivos y de vehiculizarlos a través de estrategias individuales y colectivas, que sepa reflexionar y evaluar sus acciones y las de las demás, que conozca elementos de ambas culturas, y que sepa utilizar sus instrumentos, que conozca el funcionamiento de las dos sociedades y pueda adaptarse e interactuar con ambas.
El alumno debe ser capaz de participar en cualquier realidad que le toque vivir, que puedan intervenir con sus conflictos, sus historias personales y formaciones colectivas.
Uno de los elementos que el alumno debe saber utilizar es la lengua tanto mapuche como castellana, ya que la lengua mapuche es la madre (es decir “su” lengua, entendiendo que la misma es adquirida al momento de nacer, de ahí el mote de “lengua madre”), y el castellano -que es aprendido como segunda lengua- le va a servir para poder desenvolverse y comunicarse dentro de la sociedad, o en términos de Novaro, “le va a servir para defenderse”.

Perfil del docente
El docente debe ser un docente intercultural. La formación del docente que estará a cargo de los talleres exigirá el dominio, el conocimiento de los procesos de aprendizaje mapuche y no mapuche.
El docente debe incorporar en su formación conocimientos que le permitan diseñar, planificar, conducir, coordinar y evaluar los distintos talleres.
El docente debe tener apertura al trabajo interdisciplinario, a la autoeducación y autocrítica constante.

Esto implica que el docente debe buscar estrategias para superar los prejuicios, no dejarse inmovilizar por las dificultades y construir lazos entre la sociedad, la escuela y los chicos; de esta manera debe ser creativo frente a los obstáculos que se le presentan, para lo cual debe buscar otras formas de educación que no sean las ya establecidas.

Evaluación de la experiencia
En el desarrollo de la experiencia se valora:
• Tener una identidad definida y fortalecida.
• Romper con el fantasma de que el mapuche vive en zona rural, y que la sociedad comience a interiorizarse de que el pueblo mapuche vive en la ciudad.
• Fortalecer el sistema educativo mapuche.
• Recuperar nuestras instituciones como base de nuestra organización.
• Elaborar una propuesta para implementar un nuevo plan educativo que beneficie al pueblo mapuche y a la sociedad no mapuche, llamado "Educación Intercultural para la Provincia de Neuquén".
• Trabajar en conjunto con diferentes sectores sociales que ven viable y necesario un cambio en la educación a través de la propuesta de Educación intercultural, entendiendo la interculturalidad como un derecho de ambas sociedades.
El pueblo mapuche también es víctima de la política de ajuste del gobierno, a través del sometimiento de Argentina librado a las decisiones político económicas de los países del primer mundo.
Sin recursos, los proyectos para el desarrollo de la identidad y su fortalecimiento pueden quedar muy bien escritos en la teoría sin que se piense algún día llevarlos a la práctica.
Pero lo que aquí se agrava no es solamente la extinción del pueblo mapuche, sino que se pierde la posibilidad de compartir la diversidad cultural a través de los conocimientos que los mapuche hemos desarrollado milenariamente.
La negación de la diversidad cultural tanto del Estado Nacional como del Provincial hoy imposibilitan no sólo al pueblo mapuche, sino que niegan ese derecho a la sociedad no mapuche, queriendo complacernos con la globalización y falso discurso de igualdad, que lo único que logra es mayor dispersión y conflicto entre ambas sociedades, quitándose la responsabilidad de su sometimiento y opresión.

Aspectos positivos y negativos
Positivos

• Recuperación y fortalecimiento de la identidad mapuche en la ciudad.
• Los niños se van fortaleciendo en su identidad, debiendo enfrentar la discriminación generada en distintos ámbitos de la ciudad.
• Desarrollo de la educación mapuche en los hogares.
• Creación de espacios interculturales en la otra sociedad.
• Intercambio de conocimientos con la otra sociedad, aportando los principios y valores filosóficos del pueblo Mapuche.
Negativos
No observamos aspectos negativos en el desarrollo de la experiencia, pero sí factores limitantes que frenan mejores logros y alcances de la misma.
Por ejemplo:
• Falta de recursos económicos que impiden llegar a la distintas comunidades (30 km la más cercana y 500 km la más lejana).
• Un año de apoyo económico representa una pequeñísima parte en el proceso de fortalecimiento de la educación mapuche, y menos aún cuando de esto depende también el pensar un nuevo sistema educativo de base intercultural.
• La aplicación de la educación intercultural no puede ser frenada, porque cada vez se torna más necesario un cambio educativo; además, si este es entendido como el derecho a la diversidad cultural, y reclamado no sólo por el pueblo mapuche sino también por la sociedad no mapuche.
• Las encargadas de llevar adelante el centro educativo debemos trabajar fuera de la organización para sostener nuestros hogares, lo que nos impide dedicar tiempo completo al trabajo en la experiencia.

En lo concerniente a los aspectos negativos, la falta de responsabilidad del Estado para con toda la sociedad -esto es, lo ya dicho precedentemente: sin división alguna entre comunidad mapuche y “sociedad occidental”-, se traduce en un Estado literalmente ausente ante las problemáticas, ya sean tanto económicas como ideológicas, que surgen y que es necesario sortear para lograr una educación intercultural plena.
Por otro lado, también debe observarse que sigue vigente la discriminación y la autodiscriminación hacia lo diferente, lo que provoca un retardo importante en el proceso intercultural.

Replicabilidad de la experiencia
No es posible pensar esta experiencia de recuperación y fortalecimiento de la educación autónoma en instituciones ajenas al pueblo mapuche.
Nuestra educación se basa en la forma en que los mapuche vemos y relacionamos con el Waj mapu -territorio, la base para entender esta relación es el mapuzugun, nuestro idioma; los encargados de guiar y ordenar este aprendizaje son nuestras autoridades LOGKO - PIJAN KUSEMACI - WERKEN.
Consideramos que la experiencia analizada no debería circunscribirse exclusivamente a la comunidad mapuche, sino antes bien seria relevante que en la misma participen alumnos y docentes tanto mapuches como no mapuches, encolumnados tras un mismo proyecto e integrados en un mismo espacio. De esta manera, la interculturalidad alcanzaría el sentido de tal.
Razones por las que esta experiencia debería replicarse
La provincia de Neuquén debe asumir, en primer término, que es bicultural. El paso de reconocerse en la diferencia será el camino para asumir una identidad provincial no etnocéntrica ni subordinante. Hemos recibido un legado de más de un siglo de caprichoso empeño en defender una ficticia "cultura e identidad nacional", sin asumir el sentido de pertenencia a una provincia que posee la enorme riqueza de la existencia de otros pueblos y culturas; que el crecimiento y proyección de estos pueblos se conjuga con los intereses de una sociedad no excluyente, que la educación intercultural puede plantearse caminos que se encuentren para intercambiar y convivir en la diferencia.
Para esto también vemos necesario posicionarnos ante otro enfoque que trata de explicar el "ser neuquino" identificándolo con el "crisol de razas", esa fusión o amalgama cultural conformada por las sucesivas oleadas de migrantes que supo cobijar Neuquén.
Esta visión es otra de las formas de anular la diversidad, ya que tanto los originarios de esta región como quienes llegaron posteriormente serían hoy resultado de una mezcla cultural que dio forma al neuquino actual. En realidad, el crisol ha actuado fundiendo lo diferente e imponiendo un único tipo nacional, el que sólo encuentra variación en las fiestas típicas de algunas localidades del interior. De hecho, la identidad provincial se reconoce en un ser neuquino que no se articula en la diferencia, sino que las funde en la idea de que todos somos "argentinos", y que los mapuche son una variedad cultural, o una supervivencia en vías de desaparición, cuando no una avanzada extranjera que quiere apoderarse de la Patagonia.
Esta posición anula la diferencia y desacredita la demanda mapuche de autonomía. Partiendo del supuesto de que los mapuche son una rémora del pasado, no son propiamente algo que tenga existencia y proyección en el presente. Puesto de otra forma, el conflicto mapuche/argentino estaría históricamente concluido o superado desde la finalización de las "conquistas" militares. Ahora, integrados y subordinados como estantes de museo, no son objeto de conquista ni opresión. En una palabra: no tienen nada que demandar.
Es por esto que sostenemos que la identidad neuquina por hibridación no sólo es engañosa sino que es parte de la colonización ideológica: por un lado no hay "mapuche", por el otro, todos lo somos. Esta es una interculturalidad vaciada de sentido, quizás apta para decorar los cuadernos de clase, pero no es la respuesta que nuestro Pueblo demanda. Es la pregunta que el sistema intenta imponernos para dominarnos culturalmente. Reconocer la biculturalidad o la pluriculturalidad implica decisiones políticas que seguramente conllevan redefiniciones de tipo estructural en lo económico, en lo social, en lo jurídico, en lo cultural.
Los motivos anteriormente expuestos son los que nos permiten afirmar que una educación intercultural posibilitaría de manera sumamente eficaz una integración de culturas, sin que por ello una deba subordinar a la otra, sino más bien en procura de una articulación que se nutra del respeto y convivencia entre lo divergente.
De esta forma, la interculturalidad es un camino válido para fortalecer las distintas identidades, ya que relativiza la posibilidad de que la escuela se constituya como un agente formalizador de cultura occidental y que intente por esta vía subordinar a la identidad mapuche.
¿Qué aporta la Educación Mapuche a un nuevo sistema educativo?
Hoy más que nunca debemos revisar el rumbo como sociedad. La cultura occidental que hemos mamado desde hace más de 500 años, experimenta un franco deterioro y decadencia. La muestra más clara de esta decadencia tiene que ver, fundamentalmente con las prioridades de valores que promueve. La violencia, por ejemplo, es una de esas prioridades. Cuando nos damos cuenta de que el principal gasto económico que hace la civilización occidental es en armamentos, es claro que dentro de sus prioridades valóricas, la violencia es prioridad uno.
La valoración del dinero, está también dentro de la más alta prioridad. Tiene que ver con la forma en que se articula la sociedad alrededor de patrones de consumo que no están definidos por las necesidades básicas de las personas, sino por la sobreoferta de mercancías que buscan su realización en el mercado.
"No es casualidad que el sistema desarrolle los negocios más lucrativos del mundo actual: la venta de armas y el tráfico de drogas. Las armas, productos del miedo de morir; y las drogas, producto del miedo de vivir", dice un conocido pensador.

Ante estos dos máximos valores que la civilización occidental pregona, la posibilidad de construir un orden intercultural está fuera de los intereses del actual sistema.
Una de las causas que explica este estado de decadencia es la obsesión egocéntrica de este sistema. Todo está en función de y para el hombre, estableciendo distancia con la naturaleza o manipulando su entorno natural. De dueño y señor de la historia, el hombre se convirtió en dictador -y recordemos que para la cultura no sólo mapuche sino andinas en su totalidad, todos los seres vivos son igualmente importantes, no hay supremacía del hombre sobre los demás seres-.
La actual civilización tiene que ver con eso, con la soberbia y la idolatría de lo humano-tecnológico sin ética sobre lo natural, que ha llevado a romper con los múltiples sentidos que tiene la naturaleza.
Entonces, cuando hablamos de crear una nueva cultura a nivel educativo, estamos hablando de ejercer una mirada crítica de esa civilización y a partir de ahí, sentar las bases para una civilización intercultural.
Partimos del optimismo y la convicción que esto es posible. Es posible vivir de una manera diferente, en un estado superior, porque después de todo, está dentro de nuestras posibilidades la superación o la búsqueda de situaciones más igualitarias en muchos campos de la vida social y con la naturaleza.
Ahora, ¿quiénes pueden hacerlo? Creemos que no esta generación, sino las futuras. Pero hay gérmenes (siempre los hubo) que al menos disputan las bases desde una concepción intercultural basada en la igualdad de derechos para ser diferentes. Es desde esas bases que podemos romper la lógica de la civilización occidental con sus patrones de producción, acumulación y consumo, y las relaciones de depredación y contaminación creciente con el medio ambiente o ixofijmogen, del cual somos parte.
Introducir en la educación una nueva cosmovisión que refleje una relación más equilibrada, más simbiótica entre sociedad y naturaleza. Aquí es donde el Pueblo mapuche quiere aportar sus planteos, conocimientos y sus prácticas para una nueva educación, una educación intercultural.
Promover en la educación su vinculación a la vida misma, al entorno natural y a la vida familiar y comunitaria; vida que se gesta en el núcleo familiar y que se socializa en comunidad.
En el caso de la cultura mapuche, el niño toma contacto con este sistema desde que está dentro del vientre de su madre. Cuando la pareja se conforma se unen los pensamientos, el TUWVN, el KVPALME, el origen, la descendencia, y continúa aún después de la desaparición física del ce a través del PEWMA, de los sueños. El PEWMA es la comunicación que mantenemos más allá de lo que hoy se denomina "muerte" con las diversas fuerzas NEWEN. También este conocimiento perdura y continúa viviendo a través de la enseñanza que dejamos en vida.
Es por eso que nuestra educación no tiene grados, ciclos ni profesores, y el espacio físico es el WAJ MAPU, es el contacto con la naturaleza y no las cuatro paredes de un aula. En cada ceremonia filosófica, en cada GVBAMTUWVN que el Pueblo mapuche hace, está presente nuestra educación.
Como conclusión final, creemos que es posible trabajar con la diversidad integrando en un solo eje aquellas costumbres, saberes, creencias y, en fin, conocimientos de las distintas culturas que redunden en un mejor ser. Y ese eje bien puede estar constituido por una educación intercultural que, como advertimos a lo largo del presente trabajo, es posible.
Como futuros profesores, sentimos la necesidad de trabajar a partir de la concepción de educación intercultural. Y en lo que a nuestro campo respecta, la música, aseveramos que la misma es un arte y que como tal tiene la facultad de articular incluso desde la diferencia, desde los diferentes géneros, desde los

diferentes folclores, desde los diferentes sentimientos expresados en una obra, ya que todo conforma algo que en su última desembocadura, une: la música, expresión cultural capaz de movilizar los sentires de un pueblo y reflejar sus ideologías; todo ello gracias a que es un agente concientizador .
En definitiva, esto nos impulsa a ser concientes de que se nos abre –a partir de la educación intercultural- un camino de construcción que constituya un plexo entre lo formal y lo no formal de los distintos procesos educativos de la sociedad.

Experiencia tomada de: http://coleccion.educ.ar/coleccion/CD9/contenidos/experiencias/exp26/index.html

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